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La provisión supone la aceptación definitiva del preacuerdo de noviembre
Repsol ha aceptado el acuerdo de compensación por YPF. La petrolera ha decidido provisionar 1.279 millones de euros ante la buena marcha de las negociaciones celebradas a lo largo de las últimas dos semanas en Buenos Aires y ahora tan sólo necesita el visto bueno de su consejo de administración y de la junta de accionistas para dar por cerrado el caso YPF.
Según fuentes consultadas, el acuerdo puede incluir una emisión de bonos de cerca de 3.000 millones de dólares a diez años, más la entrega de deuda ya emitida hasta alcanzar los 5.000 millones pactados el pasado mes de noviembre. Con esta estructura, los equipos de trabajo consideran que se otorgan las suficientes garantías, tal y como exigía la petrolera.
El consejo de administración de la petrolera tendrá que dar el próximo martes día 25 su visto bueno a las condiciones totales del pacto y planteará la celebración de una junta general de accionistas a finales de marzo, previsiblemente, entre el 26 y 27 de dicho mes.
Posteriormente, el Congreso argentino tendrá que dar luz verde a la emisión de bono para facilitar el cobro de la compensación por parte de la petrolera española.
Aceptación tácita
Repsol aseguró que todavía el acuerdo no está cerrado, pero su decisión de provisionar supone la aceptación tácita de la firma del preacuerdo alcanzado el pasado mes de noviembre.
Según ha comunicado hoy Repsol a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), va a dotar una provisión de 1.279 millones de euros después de impuestos con cargo a los resultados del ejercicio 2013 atendiendo al citado acuerdo. De esta forma, se “revalúan” las acciones expropiadas a 5.000 millones de dólares (casi 3.645 millones de euros).
Ayer, fuentes de la negociación cercanas a El Economista América avanzaron que los ejecutivos de la petrolera habían aceptado el borrador del acuerdo y se estaban ultimando los detalles, aunque no llegó a corroborarse de forma oficial.
Así, a falta de confirmación, se prevé que la petrolera reciba varios bonos con un valor nominal en el entorno de los 5.500 millones de dólares. Estos bonos combinarían títulos ya emitidos y una nueva referencia a 10 años con un valor cercano a 3.000 millones de dólares, señalaron a Reuters fuentes cercanas a las negociaciones.
Como los bonos ya emitidos cotizan con descuento, el Gobierno argentino utilizará el bono de nueva emisión para alcanzar una cifra de 4.500 millones de dólares de valor de mercado acordada, indicó la fuente.
“Lo importante de este acuerdo es que Argentina va a reconocer una deuda de 5.000 millones de dólares con la expropiación”, dijo la fuente, que explicó que esto diluye el riesgo de que los bonos entregados a Repsol pierdan valor y le protegen en caso de que se produjera un default de los mismos.
La presidenta argentina Cristina Fernández nacionalizó la participación mayoritaria de Repsol en YPF en 2012, lo que provocó un conflicto con España, tensiones en el órgano de administración de la petrolera y congeló las inversiones internacionales en el gran yacimiento argentino de Vaca Muerta.