El correo
ANE BARANDIARAN
Los fallos dictados en Bilbao, Vitoria y San Sebastián son favorables al consumidor tanto en las demandas sobre gastos de tramitación como en las de ‘suelos’
Los jueces en prácticas designados para llevar los casos sobre cláusulas abusivas en Euskadi están asestando un duro golpe a la banca al pronunciarse de forma clara a favor de los consumidores. EL CORREO avanzó ayer los primeros fallos dictados a primeros de septiembre en Bilbao sobre gastos hipotecarios, que atendían casi de forma íntegra las pretensiones de los demandantes. Pero los togados están trabajando a buen ritmo y ya han emitido varias decenas de sentencias tanto en la capital vizcaína (23) como en Vitoria (18) y San Sebastián en una línea muy similar. Dada su posición en favor de los intereses de los clientes, es de esperar que la cifra de 2.383 reclamaciones contra entidades financieras ya presentadas en el País Vasco crezca a toda velocidad.
En Bilbao son tres los jueces de refuerzo dedicados a esta tarea en el Juzgado de Primera Instancia número 11. Se trata de Laura Marín, Pablo Aguirre y Daniel González. Ella fue la primera en incorporarse y por eso son suyas las dos primeras sentencias dictadas, que tratan sobre gastos hipotecarios. Salvo en el caso de la notaría, cuyo arancel reparte al 50%, Marín condena al banco -en este caso, Kutxabank- a devolver el 100% de lo abonado en el resto de conceptos -registro, gestoría…-, incluso en el caso del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados. Además, considera adecuado que se plantee el proceso como de ‘cuantía ilimitada’, lo que es muy beneficioso para los bufetes de abogados ya que pueden cobrar en costas cerca de 1.800 euros aunque la cantidad demandada sea muy inferior.
Su colega, Daniel González, ha dictado por su parte una sentencia sobre cláusulas suelo que resulta muy esperanzadora para los hipotecados. En ella declara nulo el acuerdo extrajudicial al que llegó la entidad -Laboral Kutxa en esta ocasión- con el cliente en el año 2014, consistente en eliminar el interés mínimo a cambio de que éste renunciase a ir a los tribunales. Ya había jurisprudencia en este sentido pero es la primera vez que los jueces de refuerzo se pronuncian sobre el asunto. González es tajante y condena a la entidad a devolver todo lo cobrado de más por el suelo del 2,75%, más los intereses legales, y también a recalcular el cuadro de amortización. Asimismo, le carga las costas.