Levante
La suspensión de pagos de la histórica empresa promotora Onofre Miguel sigue arrastrando sociedades filiales y participadas. El juzgado de lo Mercantil número dos de Valencia ha dictado auto de concurso de acreedores de las sociedades Parques Empresariales, Espacios para Vivir, Ciudad Jardín Bétera y Altipla, todas ellas ligadas a la familia Miguel.
El juez ha nombrado administrador concursal a José Andreu López y ha dado un mes de plazo a los acreedores para que presenten sus créditos y puedan ser incluidos en los listados correspondientes al expediente de las mercantiles.
La imposibilidad de refinanciar deudas abocó al concurso a uno de los pocos grupos inmobiliarios valencianos que habían sorteado la quiebra. El grupo Onofre Miguel y seis sociedades filiales suspendieron pagos el pasado mes de diciembre tras no alcanzar un acuerdo con los principales bancos acreedores y no encontrar interlocución en la sociedad de gestión de activos (Sareb) habilitada por el Gobierno y a la que se han traspasado los créditos inmobiliarios de los bancos nacionalizados.
Onofre Miguel tiene un pasivo cercano a 130 millones de euros. Las filiales que entraron en concurso en diciembre son Mibor Urbana, Onofre Desarrollo, Onofre Gestión, Onofre Ismet, Onofre Valores y Oropeak. Ahora se suman otras cuatro sociedades.
El grupo está participado por el presidente de los promotores valencianos José Luis Miguel, si bien este abandonó la gestión del mismo en junio del año pasado por discrepancias familiares en el modelo de gestión y evolución del negocio. Su hermana Cristina Miguel es ahora la responsable de las empresas.